Carlos Exposito García / ene 30, 2025
En el último año, la profesión legal en España ha experimentado una profunda transformación impulsada por la digitalización y la adopción de nuevas tecnologías. Desde la implementación de herramientas de inteligencia artificial hasta la renovación de liderazgos colegiales y la aparición de desafíos éticos, los abogados españoles se enfrentan a un panorama en constante evolución que redefine su práctica y el servicio a la sociedad.
La integración de tecnologías digitales ha sido una tendencia creciente en el sector legal. Herramientas de inteligencia artificial (IA) están revolucionando la investigación jurídica, la creación de documentos y la comunicación con los clientes, brindando a los abogados conocimientos y eficiencia sin precedentes. La incorporación de estos avances ha sido crucial para que las empresas legales sigan siendo competitivas y relevantes en un panorama global en rápida evolución, donde aquellos que se resisten al cambio corren el riesgo de quedarse obsoletos.
Despachos especializados en derecho digital, como EDM Legal y Ucelay, ofrecen asesoramiento en áreas como protección de datos, comercio electrónico y propiedad intelectual, adaptándose a las necesidades de una sociedad cada vez más digitalizada.
Liderazgo renovado con enfoque en la innovación
La renovación en el liderazgo de los colegios de abogados ha traído consigo un enfoque en la modernización tecnológica. Por ejemplo, Augusto Pérez-Cepeda, candidato a la reelección como decano del Colegio de Abogados de A Coruña, ha destacado la importancia de la formación jurídica y la implementación de inteligencia artificial para mejorar la eficiencia en la gestión de los despachos. Su propuesta busca no solo mejorar la práctica legal, sino también abordar problemas como la congestión en los juzgados.
Desafíos éticos en la era de la inteligencia artificial
La adopción de tecnologías como ChatGPT ha planteado nuevos desafíos éticos para la profesión legal. Aunque estas herramientas pueden automatizar tareas y analizar grandes volúmenes de datos, su uso incorrecto puede acarrear consecuencias graves, como la inclusión de sentencias inexistentes o leyes extranjeras en documentos legales, vulnerando la protección de datos y la ética profesional. Casos recientes en España han evidenciado estos riesgos, resaltando la necesidad de un uso responsable y supervisado de la inteligencia artificial en el ámbito jurídico.
Nuevas iniciativas tecnológicas para la protección legal
La tecnología también ha sido aliada en la protección de colectivos vulnerables. El Ayuntamiento de Alcorcón ha lanzado un proyecto piloto que consiste en la instalación de una aplicación espía en los teléfonos móviles de cincuenta víctimas de violencia de género. Esta 'app' permitirá grabar de forma oculta agresiones o amenazas, almacenando las pruebas en una nube y siendo legalmente válidas para su uso en un juicio gracias a la tecnología Blockchain. La iniciativa busca mejorar la protección de las víctimas no solo con la intervención policial, sino también en los procesos penales.